Si algo hemos aprendido de los últimos años es que el eCommerce no para de reinventarse o, al menos, de intentarlo. Ya se han publicado multitud de artículos sobre las tendencias para 2025, donde la batalla de la IA, las redes sociales y el eCommerce «verde» seguirán en boga. Pero, ¿qué hay realmente detrás de las nuevas tendencias? ¿Son avances revolucionarios o simplemente el mismo guión pero con distintos actores? Hay más matices de los que aparenta la situación.
La irrupción definitiva de la inteligencia artificial
Si algo ha revolucionado el terreno de la informática y la forma de trabajar en los últimos años es la inteligencia artificial (IA). Cada vez es más avanzada y sus aplicaciones van llegando a todos los niveles de los negocios, a veces de forma visible, a veces por la puerta de atrás, de forma discreta. De hecho, no son pocos los trabajadores que temen por sus puestos de trabajo al ver cómo las IA son capaces de hacer muchas de sus tareas.
Hemos pasado de tener pequeños chatbots que contestan algunas preguntas en base a palabras clave y respuestas predefinidas a modelos de lenguaje natural con más capacidad. Ya son tremendamente potentes: no solo su conversación es natural y fluida; aceptan texto, voz, imágenes y vídeo para interactuar, responden con gran claridad y se adaptan al nivel conversacional que prefiera cada persona. Pronto veremos cómo esto es cada vez más habitual en los chatbots de sitios web y asistencia telefónica y videofónica, sin que produzca esa sensación de «estar hablando con un sistema robótico inútil».
A nivel de creación de contenidos, ya sean descripciones de productos para una tienda o imágenes creadas a partir de unas cuantas palabras clave, las IA son rápidas y efectivas. Son excelentes resumidoras, y a partir de un folleto explicativo o una descripción narrada pueden destilar la esencia de un producto en un copy atractivo para vender más. Además, pueden hacer tareas que hasta ahora eran difíciles de resolver: comparar productos, ofrecer consejos de uso, nuevas ideas… Y esto es válido tanto para una tienda de productos gourmet como para una de gadgets tecnológicos o de productos de belleza.
Lo más nuevo son los agentes inteligentes: automatismos capaces de comprar billetes de avión, hacer un pedido a un restaurante o buscar el mejor precio en varias tiendas, como quien busca en Google. Están especialmente entrenados para no cometer errores, por ejemplo comprando un producto de la talla inadecuada. Quienes desarrollan las tiendas de eCommerce pueden facilitar su tarea a los agentes, incluyendo código invisible en sus páginas, que incluya precios, modelos, tallas, variantes y otra información para facilitar ese proceso automático.
En cuanto a la seguridad, todos los desarrolladores de IAs están poniendo mucho cuidado en añadir los filtros adecuados para que las respuestas de las IAs no sean peligrosas ni nocivas. De hecho, en Europa estamos más protegidos que en otras regiones, gracias a las normativas de la UE, que regulan su uso. El resumen es que podremos ver sitios de eCommerce con mejor información, ayudas más efectivas a través de chatbots y, probablemente, mejor personalización.
Realidad aumentada/virtual
Los inicios de cualquier nueva tecnología son complicados, y la realidad aumentada y virtual no son una excepción. Las versiones más avanzadas requieren de un hardware potente: visores, ordenadores y dispositivos móviles de última generación… Aunque hay excepciones y hay apps de realidad aumentada muy interesantes. Es una tecnología a la que le queda mucho por andar, aunque este podría ser definitivamente su año.
La gente ya ha podido ver cómo de efectiva es la realidad aumentada para probarse virtualmente prendas de moda, aplicar maquillaje y ver cómo queda antes de comprarlo, o medir y asegurarse que una silla o una mesa son adecuadas para el tamaño de un salón. Las muestras de color se aplican a coches, pintura para las paredes o telas de cualquier prenda. Y todo esto se puede ver en realidad aumentada a través del smartphone.
El metaverso o «mundo virtual» lo tiene un poco más complicado, pero también ofrece experiencias que no son posibles de otro modo. A todo lo anterior se puede añadir que las compras se realicen en un entorno inmersivo completamente virtual, y no solo para recorrer las tiendas de un centro comercial con aspecto de Minecraft. Se pueden organizar eventos en vivo, conciertos promocionales patrocinados por las marcas o pases de cine en los que algún gadget o producto sea el protagonista.
Influencers en todas partes
La publicidad está derivando de los grandes medios generalistas a los especializados y más allá. En concreto, hacia los pequeños –y no tan pequeños– influencers. Hace años se los denominaba «líderes de opinión» (KOLs), «embajadores» o «prescriptores de marca», pero ahora influencers es la denominación más conocida. Ellos y ellas también venden, y en el terreno del eCommerce pueden causar pequeñas revoluciones haciendo el denominado Live Shopping o eCommerce Streaming, presentando productos en tiempo real, muy al estilo Teletienda pero con un toque personal dirigido a sus seguidores en las redes sociales.
Del Live shopping existen múltiples variantes, desde la presentación rápida de productos (a veces a velocidades de récord, con la «técnica de los 3 segundos») a las reseñas patrocinadas, las entrevistas pagadas, las mesas redondas sobre productos concretos… Todo es válido si quién presenta es influyente. El formato vídeo o, mucho mejor, la emisión en directo suma puntos.
eCommerce más verde
La tendencia al eCommerce ecológico y el amor por lo verde no solo se mantendrá, sino que probablemente aumentará en 2025. Todo parece indicar que la concienciación ecológica seguirá aumentando. Es sabido que el 70 por ciento aproximadamente de los e-shoppers habituales prefieren productos respetuosos con el medio ambiente, de marcas más sostenibles y entregados con el menor impacto medioambiental.
Esto llevará a nuevos avances en cuanto a los materiales reciclados y ecológicos, vehículos de reparto eléctricos menos contaminantes y un aumento en el comercio de segunda mano.
Además de todo lo anterior, es probable que cada vez más tiendas incluyan sus sellos de «certificaciones verdes» y hagan más visible su huella de carbono, informando a todos los clientes sobre el impacto ambiental de sus productos, desde la fabricación hasta la entrega. Por esta razón, cuanto antes se hagan los «deberes» para eliminar las partes que más emisiones y huella de carbono producen, mejor que mejor.
Todo es social, el eCommerce también
Los españoles pasamos entre una y dos horas diarias en las redes sociales. Este dato es un promedio, así es que quien haga un uso más intenso o dedique más tiempo de lo habitual, seguramente, estará por encima. Otro tanto sucede con los jóvenes: el tiempo de uso diario aumenta a medida que baja la edad.
Las reglas del márketing dicen que hay que vender allí donde está la gente y, por esta razón, las redes sociales están haciendo que crezcan todas las plataformas de venta y que se integren de forma cada vez más cercana a las apps más relevantes. Es el eCommerce Social, presente en sitios como TikTok, Instagram, YouTube… Otro factor importante es que la gente confía en las recomendaciones no solo de los influencers, sino también de sus amigos, tanto los reales como los «conectados» a través de las redes sociales. Así es que muchas marcas y tiendas han pasado a dejar que sea la gente quien genere los contenidos y los recomienden de esta forma tan natural en la red.
El eCommerce Social no solo necesita de los influencers que hagan el live shopping, como se explicaba anteriormente. A veces son simplemente legiones de gente corriente la que es capaz de crear una moda o una oleada de compras en el momento más inesperado. La velocidad a la que circulan los memes, los vídeos graciosos y la explosiva combinación con la música, el ingenio y el humor puede dar lugar a ventas en el momento más inesperado.
En 2025 seguiremos avanzando hacia un eCommerce más inteligente, más verde, más inmersivo y, por supuesto, más social. Todo parece indicar que la tecnología no deja de ofrecernos soluciones que no sabíamos que necesitábamos… hasta que aparecen de repente. Eso sí, seamos realistas: detrás de tanta innovación y sostenibilidad, seguimos siendo los mismos humanos que caemos en la tentación del «añadir al carrito» porque vimos un vídeo de 15 segundos en TikTok. El futuro del comercio electrónico está aquí, y si algo está claro es que estaremos navegando entre avances brillantes y viejas fórmulas renovadas.
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Imágenes: 2025, Eco, Social (IA) ChatGPT; Chatbot – Freepik; AR – Freepik; Live Shopping – TikTok.
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