Una de las mejores ventajas de la innovación es el poder proporcionar a los ciudadanos el mayor volumen de alternativas posibles a la hora de decidir cómo quieren contribuir a la mejora de su calidad de vida. En el terreno de las energías y los combustibles, se cumple esta máxima de forma cada vez más plausible, con numerosas opciones para el fomento de la movilidad urbana sostenible. Una de ellas es el Autogás o GLP (Gases Licuados del Petróleo), que se encuentra en plena expansión y que utilizamos, entre otros combustibles, en nuestra flota.
Según declaraciones de José Luis Blanco, director general de la Asociación de Operadores de Gas Licuado de Petróleo (AOGLP), en el marco de una ponencia sobre movilidad sostenible, cada día son más los conductores que se unen al uso de este combustible, aumentando considerablemente la cifra de vehículos que se mueven gracias a él, y que ascienden actualmente en España a 25.000, de un total de 21 millones en todo el mundo.
Los que promueven este sector son por tanto optimistas en cuanto a las previsiones, ya que en el último año el consumo de Autogás experimentó un crecimiento en nuestro país de un 30%, siendo el combustible alternativo que más crece en España, según datos de la Asociación de GLP. Concretamente, Blanco detalló que más de 300 flotas en España cuentan con un ‘skid’ propio para suministro y que unos 8.000 taxis del total del parque también lo utilizan.
Blanco añadió que, a la luz de esos datos, este combustible empieza a ser reconocido por las administraciones españolas como alternativa real, limpia, económica y eficiente, y además, por su contribución medioambiental y eficiencia, está incluido en planes como el PIVE, el PIMA Aire o el Plan Azul de calidad del aire para Madrid.
Actualmente, el Autogás es utilizado por diferentes tipos de vehículos (particulares, flotas públicas y privadas, ambulancias, autoescuelas, empresas de mensajería o vehículos de mantenimiento urbano, entre otros) lo que lo convierte en un combustible flexible que gracias a su eficiencia, al ahorro de hasta un 40% en costes, limpieza y disponibilidad, se posiciona, según Blanco, como el «carburante ideal en cuanto a movilidad urbana sostenible».
Las siglas genéricas GLP engloban a varios tipos de combustibles. Lo que tienen en común es que todos ellos son obtenidos durante la extracción del gas natural: primero se extrae el crudo (campo de gas), después se realiza un proceso de destilación en crudo y finalmente se separan los componentes pesados del crudo, lo que permite una mayor eficiencia y menos gases contaminantes.
Fotos: Motorpasion.com / Tecnoenergiahoy.es
El Autogas es una apuesta segura por la sostenibilidad.