Mejorar la calidad del aire de nuestras ciudades y cuidar del medioambiente es una de las grandes prioridades de todos y cada uno de los sectores a nivel global. Como agentes involucrados en el sector del transporte y distribución de mercancías, desde SEUR no somos ajenos al movimiento sostenible, y trabajamos día tras día por implementar nuevas estrategias para reducir el impacto de nuestra actividad.

Así pues, con el fin de explorar todas las mejoras posibles de la última milla y el reparto sostenible, en esta ocasión nos paramos a descubrir las conclusiones del informe «Distribución urbana de mercancías sostenible» elaborado por la UPF Barcelona School of Management en colaboración con Fundación Naturgy. Este estudio, que en rasgos generales trata acerca de las mejoras en la planificación urbanística para actuar por la sostenibilidad, fue presentado hace unos meses en un evento en el que nuestra responsable de RSC, Julie Urban, tuvo la oportunidad de compartir la visión estratégica de SEUR en términos de reparto urbano inteligente.

El estudio comienza hablando de la necesidad de revisar los procesos que forman parte de la última milla para hacerlos más sostenibles a tres niveles distintos: tanto a nivel medioambiental, para reducir las emisiones de efecto invernadero del transporte; a nivel económico, para que los costes logísticos no se vean incrementados; como a nivel social, con el fin de mejorar la calidad del aire y la salud de las ciudades y sus ciudadanos. Además de la integración y conexión entre sí de estos tres ejes de sostenibilidad, el informe indica que para conseguir que la Distribución Urbana de Mercancías sea sostenible es necesario que se coordinen tres dimensiones implícitas en los procesos de la cadena de suministro del interior de las ciudades: la dimensión logística, la dimensión técnica y la dimensión urbanística.

Comenzando con la dimensión logística, se trata del conjunto de procesos diseñados para suministrar productos de origen a destino, y cuenta con dos condicionantes que afectan directamente al proceso de distribución urbana: el tiempo de entrega, una variable cada vez más relevante, y el volumen de carga. Cabe destacar que no existe un modelo único y prototípico de la Distribución Urbana de Mercancías Sostenible, pero para diseñar un plan sostenible y eficiente, es necesario dar comienzo por la dimensión logística, que establece 4 modelos de procesos, desde aquellos que distribuyen a establecimientos comerciales, hasta los que llegan hasta la casa de los clientes, ya sea de manera directa o a través de hubs urbanos o puntos de recogida. En el análisis de estos modelos, el estudio comparte que los procesos de distribución más destacados en términos sostenibles son aquellos que maximizan la capacidad de carga y realizan la distribución en franjas horarias de menor tránsito, y concluye afirmando que una correcta ejecución del modelo logístico se traduce en ahorros económicos de entre un 23% y un 46%.

Continuando con la dimensión técnica, el estudio realizado por la UPF hace referencia a la tipología de vehículos involucrados en el transporte y procesos logísticos, y pone de manifiesto cómo el transporte por carretera genera el 95% de las emisiones de CO2 del transporte, por lo que resulta imprescindible actuar en esta dimensión para reducir el impacto ambiental y el impacto social.

Si bien la elección de los vehículos en la última milla y Distribución Urbana de Mercancías va a depender de factores como el tipo y tamaño de mercancías, la distancia, las infraestructuras disponibles, o los modelos urbanísticos, es necesario combinar los vehículos adecuados a cada tramo para ser más eficientes y reducir los efectos negativos del transporte a la salud de los ciudadanos y el medioambiente.

Infografía extraída del Informe «Distribución urbana de mercancías sostenible» elaborado por la UPF Barcelona School of Management en colaboración con Fundación Naturgy.

Infografía extraída del Informe «Distribución urbana de mercancías sostenible» elaborado por la UPF Barcelona School of Management en colaboración con Fundación Naturgy.

 

Así pues, el estudio indica que las mejores prácticas a nivel internacional tienen en común la búsqueda de alternativas al gasóleo y la gasolina, dando paso a camiones propulsados por gas natural, furgonetas y vehículos eléctricos e incluso sin motor para la última milla. Estas alternativas, unidas a un correcto mantenimiento técnico de los motores empleados, puede llevar a una reducción del 58% de emisiones de efecto invernadero y reducción del 96% de aquellas que afectan a la salud humana.

Por último, la tercera dimensión implícita en la consecución de una Distribución Urbana de Mercancías Sostenible es la urbanística, refiriéndose a la ordenación urbana y los elementos presentes en las ciudades que establecen las posibilidades de realizar cambios por una distribución de mercancías más eficiente en las urbes. En este ámbito, la disposición de los espacios y las escasas posibilidades de modificación de la ordenación urbana hace que se limite el margen de actuación; sin embargo, el informe indica que las infraestructuras urbanas deben adaptarse para lograr los objetivos de sostenibilidad. De este modo, entre las mejores prácticas identificadas resalta la incorporación de aspectos legislativos e infraestructuras que faciliten la distribución, así como la cooperación entre las empresas de transporte, los comercios, las administraciones públicas y los urbanistas.

Desde SEUR llevamos años trabajando por el reparto urbano inteligente y la última milla, implementando cada vez un mayor número de medidas que dan respuesta inequívocamente a las tres dimensiones identificadas por el informe desglosado. Ya en 2020 logramos un importante cambio con respecto a nuestra flota sostenible, que supone el 10% del total, y mediante la cual logramos recorrer 12.260.743 kilómetros, un 10% de todos los kilómetros recorridos por la compañía en el pasado año. Además de aumentar progresivamente el número de vehículos de bajas emisiones, con vistas a lograr un reparto 100% sostenible en el centro de 20 ciudades españolas para 2025, nuestra apuesta también incluye la ampliación de nuestra red Pickup y lockers para realizar entregas más sostenibles, principalmente en el centro de las ciudades.


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