Realmente estamos atravesando un año muy extraño, y muy duro, para un amplio abanico de sectores económicos. Todos tenemos claro que lo primero es la salud de cada integrante de la sociedad, pero como bien se encargan de recordarnos los expertos, tras cada crisis sanitaria viene de la mano, ya está aquí, de hecho, una crisis económica.
Uno de los sectores que por su especial idiosincrasia ha podido sortear los embates de la crisis causadas por el SARS-Cov-2, y que en cierto modo se ha aprovechado de ella, es el comercio electrónico. Hablamos, eso sí, de una actividad muy transversal ya que son muchos los bienes y/o servicios que pueden ofrecerse online. En algunos casos podemos hablar de un producto virtual y en el resto serán las empresas de paquetería las que nos traigan el bien adquirido hasta nuestra puerta.
Nos vamos a centrar precisamente en el ecommerce, ya que es uno de los ejes de esta publicación, pero nadie debería olvidar que las tiendas físicas, especialmente las pequeñas, están atravesando una época muy complicada y que también toman parte en eventos especiales como el Black Friday.
¿Qué esperan los consumidores?
Íbamos a empezar este artículo intentando dar una tímida respuesta a las cuestiones que las pequeñas empresas que tienen un ecommerce (o no tan pequeñas) se plantean al preparar el Black Friday, cuando nos hemos encontrado una cuestión aún si cabe más importante, y de la que a veces, hay que reconocerlo, nos olvidamos: ¿y los consumidores, qué esperan ellos?
La lanzan desde el siempre interesante boletín Think with Google, siempre atento a la tecnología, el marketing y las tendencias. E intentan ofrecer una respuesta en una infografía que nos desvela pistas interesantes como, por ejemplo, que los consumidores están haciendo más búsquedas sobre productos en Internet que antes de la crisis. También es importante ver que la confianza del consumidor se va recuperando poco a poco, aunque dicha recuperación se está truncando en parte por los rebrotes, esta temida segunda ola, que padecemos en la actualidad. Lo que queda claro es que los compradores van a hacer uso de la comodidad y la seguridad que les ofrece el uso del comercio electrónico.
Algunas previsiones al respecto
A falta de un mes para que llegue el evento, recordemos que se celebra el 27 de noviembre, previsiones no nos van a faltar; de hecho se llevan haciendo desde hace semanas. Y si el ecommerce siempre ha revestido una especial importancia en este día del año, como dicen algunos medios, con lenguaje un tanto bélico, este año el terreno de batalla está en Internet. Las tiendas de comercio electrónico siempre se han movido como pez en el agua en el marco de un día donde todas las ofertas han de ser, por fuerza, exprés, flash, o como prefiramos llamar a estas bajadas de precio muy acotadas en el tiempo. Este año además, cuentan con el impulso del significativo crecimiento que han tenido las ventas, y el número de usuarios, durante el confinamiento que sufrimos durante la primera oleada de la pandemia.
Algunas tiendas online deberán echar el resto técnicamente para que los incrementos de tráfico previstos no provoquen “caídas” en sus webs. Se espera también que haya descuentos durante varios días, para aprovechar la predisposición de los clientes a efectuar compras. Los negocios que tienen tanto canal de venta físico como online intentarán aprovechar las ventajas que da Internet, donde las medidas de seguridad que se han de tomar no afectan a la compra en sí, siendo responsabilidad posterior de la empresa encargada de entregar los pedidos.
Tenemos un precedente: recientemente se ha celebrado el Prime Day de Amazon, y al parecer han pulverizado récords de ventas. También tenemos a muchos consumidores con más ganas que nunca de dejar atadas con tiempo las compras navideñas (un 74% de los españoles tienen esto en mente), por si la situación que atravesamos se pudiera complicar. Según, de nuevo, las previsiones de Google, hasta “un 40% de la población declara tener intención de comprar en el periodo comprendido entre el Black Friday y el Cyber Monday”.
Alguna previsión más, y seguimos con el foco puesto únicamente en España: en principio, como venimos comentando, las compras van a ser fundamentalmente online; se estima que en un 70%. Sin duda, los hábitos de consumo están cambiando debido a la pandemia, y un 27% de los consumidores habituales de tiendas físicas van a renunciar a ello en esta ocasión. Por mucho que nos apasione el mundo del ecommerce, esta tendencia es coyuntural y se podría decir que desoladora. El futuro ha de pasar, por fuerza, por la convivencia de los diversos canales de venta.
También desde SEUR se están haciendo previsiones para la semana posterior al Black Friday, que incluye el Ciber Monday, donde se prevé mover más de 4 millones de paquetes. Para este tipo de previsiones son muy útiles las herramientas de Big Data y Machine Learning, de las que aquí tratamos a menudo. En el caso de SEUR el Black Friday se podría decir que es una primera parada antes de mirar hacia la campaña de Navidad, y por eso ahora mismo, además de preparar sus infraestructuras y afinar sus previsiones, van a reforzar su plantilla con 2.100 profesionales que se unirán a los 2.000 ya incorporados desde que se decretó el estado de alarma.
Estamos contribuyendo a la generación de #empleo en una situación como la actual, con la incorporación de 2.000 profesionales desde el inicio de la pandemia, a los que ahora se suman 2.100 para hacer frente al periodo de Navidad y Rebajas. https://t.co/o105JhTEky
— SEUR (@SEUR) October 28, 2020
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