¡Se acabaron las barreras! El e-commerce está permitiendo que se supere cualquier obstáculo geográfico y que sea posible enviar, incluso, cualquier producto de alimentación manteniendo la temperatura adecuada y sin alterar la cadena de frío. A lo largo de este proceso, se garantiza la calidad y seguridad de un alimento, desde su origen hasta su consumo. Y si alguno de los puntos de la cadena de frío llegara a verse comprometido, toda ella se vería afectada perjudicando la calidad y seguridad del producto.

Por eso, es importante mantener esta cadena de frío durante todo el transporte: con una temperatura controlada de entre + 2ºC y +8ºC desde la recogida hasta la entrega en el destino.

Algunas empresas ya utilizan este tipo de servicio para hacer los envíos a sus clientes, como es el caso de Petra Mora, un minimarket gourmet que vende a toda España refrigerados como ensaladas y carne, y enviando los productos en 24 horas en perfectas condiciones. Otro ejemplo destacable es el de La Gamba Roja, que permite al consumidor disfrutar del auténtico sabor a mar gracias a su apuesta por el e-commerce y su servicio de calidad.

Y es que no hay duda, la gastronomía se ha consolidado como un negocio de éxito en el e-commerce, si tenemos en cuenta que la intención de compra en la red de productos relacionados con la alimentación ha crecido un 44% en los últimos años, según un reciente estudio de Nielsen.

Con este tipo de servicio lo que se sigue buscando es satisfacer y adaptarse a las necesidades diarias del cliente. Porque hay veces que ciertos alimentos requieren un cuidado específico, y de esta forma no hay que preocuparse por nada, ya que disponemos de todo lo necesario para que los alimentos se conserven y se reciban en condiciones óptimas.

Imagen | J,C

 


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