Coche eléctrico durante la recarga de electricidad

Hoy en día es más común ver algunos coches eléctricos e híbridos por las calles. Pero aunque parezca sorprendente hay muchas personas que todavía no conocen muchos detalles importantes de estas tecnologías. Hace poco, la revista Popular Science explicaba de forma divulgativa las ocho cosas que todo el mundo debería saber sobre los coches eléctricos. A algunas de las más interesantes he añadido a continuación algunas que también son bastante comunes, así como otras respecto a nuestro mercado y situación actual.

1. Los coches eléctricos no siempre necesitan un enchufe para cargarse. Los vehículos más populares de este tipo son los híbridos, que como su nombre indica combinan un motor eléctrico con un motor convencional de gasolina. La batería de estos modelos se carga mientras se circula, en las cuestas abajo o durante las frenadas. Algunos híbridos también pueden enchufarse, pero por lo general su batería está diseñada para cargas y recargas rápidas, no para «durar» (en muchos casos ni siquiera se puede «enchufar» y su descarga se produce en cuestión de minutos). La gente suele llamar coches eléctricos a los que solo funcionan mediante electricidad y coches híbridos a los que tienen los dos tipos de motores (aunque a veces el primer término se usa incorrectamente para los segundos). Algunos híbridos también son «enchufables» y permiten cargar su batería desde una toma de electricidad.

2. Los coches eléctricos son más caros… Cuando se comparan de igual-a-igual (mismo tipo y tamaño), los coches eléctricos puros o híbridos son de momento más caros que los convencionales; algo que luego puede compensarse con el coste más bajo de la electricidad respecto a la gasolina.

3. … pero el gasto por kilómetro es menor. En cuanto al consumo puntual los coches eléctricos salen ganando: recorrer 100 kilómetros con gasolina puede costar entre 5 y 10 euros según el modelo y consumo (digamos de 4 a 8 litros a los 100) mientras que con un eléctrico y dependiendo un poco del precio del KWh, sale por unos 2 euros. Por esta razón mucha gente propietaria de híbridos recargables prefiere moverse todo lo posible con electricidad antes de activar el motor de gasolina.

4. Analizar el coste real puede ser complicado. De cara a elegir un coche eléctrico, híbrido o convencional hay que hacer muchos números. Está el coste del propio vehículo, el coste de las recargas, las distancias que se pueden recorrer, el mantenimiento, vida útil, seguros… En el caso de los coches eléctricos algunos de los más pequeños son más baratos pero se venden sin batería, así que hay que añadir el concepto «alquiler de la batería» (unos 50 euros al mes en el caso del Twizy de Renault).

5. Olvídate de las gasolineras. Los coches van equipados con un indicador de la distancia máxima que se puede recorrer con la carga de batería en cada instante que, al principio puede dar la sensación de que no vas a poder recargar tu coche, pero cada vez hay más puntos donde recargar y empiezan a proliferar las electrolineras.

6. La temperatura influye. En los coches eléctricos la temperatura puede hacer variar la capacidad de la batería. En el caso de que los ocupantes quieran encender el aire acondicionado, es posible que se resienta un poco la batería del vehículo. Así que en verano puede que haya que sacrificar comodidad por recorrido, o viceversa.

7. No se necesitan «gasolineras de carga eléctrica» especiales. En vista de que obligar a la gente a usar un modelo específico de enchufe sería poco práctico los fabricantes encontraron otra solución: algunos vehículos llevan dos, uno propio que funciona más rápido y un enchufe con clavija convencional de 220V que se puede utilizar en todas partes.

8. Es importante tener en cuenta la potencia de cada coche. Algunos vehículos necesitan una potencia concreta para recargarse; si un coche necesitan 3 KW, por ejemplo, pero la potencia contratada es de solo 2 KW puede resultar insuficiente. En esos casos hay que hablar antes con la compañía eléctrica.

9. Los coches eléctricos son más ecológicos. Esto parece obvio, pero circularon diversas informaciones acerca de que aunque no emiten CO2 sus procesos de fabricación generaban demasiados residuos y materiales tóxicos. El hecho cierto es que los estudios más aceptados por los expertos indican que teniendo todo lo posible en cuenta, y dado que los procesos de fabricación son hoy en día razonablemente similares, los coches eléctricos son más respetuosos con el medio ambiente.

10. Algunos coches eléctricos no requieren carnet de conducir. Algunos vehículos eléctricos pequeños no alcanzan el tamaño o potencia necesarios (50 CC) para que sea necesario disponer de carnet de conducir para ellos: se conocen a veces como cuadriciclos o microcoches. En cualquier caso, para circular con ellos se necesita el llamado carnet de conducir AM («ciclomotores») para el que hay que superar unas pequeñas pruebas teóricas y prácticas. Por unos pocos cientos de euros se puede circular con ellos por la calle.

{Foto: Electric car charging station (CC) Håkan Dahlström @ Flickr.}


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