A la hora de organizar nuestra propia tienda online podemos vernos desbordados por la cantidad de requisitos técnicos y pequeños detalles que hay que tener en cuenta para que la tienda funcione correctamente. Aunque no lo pueda parecer, cada detalle cuenta a la hora de convertir la visita de un cliente en potencia en una venta. Si ya de por sí las tasas de conversión en la Red son muy bajas (estimadas en torno al 3%), nuestra tienda online tiene que disponer de todo tipo de mecanismos para estimularla.
La facilidad y el atractivo con que el cliente rellena su carrito de la compra o realiza el pago son determinantes. Un metaestudio realizado por Baymard encontró que el abandono promedio del proceso de compra era de un 67% en el carrito de la compra. Por ello, es esencial que el proceso no incluya ninguna distracción (es importante evitar la publicidad de páginas ajenas a la nuestra en este momento de la compra) y ofrecer todo tipo de facilidades para su ejecución.
A la hora de dotar nuestro negocio de una plataforma de venta online tenemos dos opciones. Podemos acudir a alguna de las plataformas completas que vamos a repasar, lo que tiene la ventaja de la estabilidad y la disponibilidad de una serie de herramientas bien probadas por el proveedor; u organizar nuestro propio alojamiento con un proveedor de confianza y construir nuestra tienda de forma modular con distinto software profesional que también examinaremos más adelante. La ventaja de esta segunda opción es la posibilidad de tener un mayor control sobre las funciones que queremos integrar y una mejor personalización del proceso a fin de ajustarnos mejor a la naturaleza de nuestro producto y del cliente.
Las plataformas listas para usar suelen incluir planes mensuales de pago por el servicio. La mayoría ofrecen funcionalidades extra según nuestro plan o la posibilidad de adquirirlas. Estas son algunas de las plataformas listas para usar más populares:
Shoppify: Paquete muy popular en la Red, presume de más de 160.000 tiendas online empleándolo. Cuenta con más de un centenar de plantillas a elegir para nuestra tienda y un servicio de atención al cliente las 24 horas. Esto último resulta esencial, ya que nunca sabemos cuándo puede surgir un problema técnico, pero sí que no podemos permitirnos perder ventas por ello. Dispone de todo tipo de herramientas y aplicaciones que podamos necesitar, incluyendo un gestor de pago seguro, ajustado a la fiscalidad de cada país. Destaca la amplia comunidad de desarrolladores, que ha creado más de 1.100 aplicaciones que podemos integrar en nuestro paquete.
BigCommerce: Otro paquete bastante utilizado por su facilidad de uso e integración con todo tipo de procesos necesarios en nuestra tienda online. Incluye herramientas como newsletters, estadísticas de ventas o reseñas del cliente en el paquete básico. Destaca por su buena integración en varias redes sociales para promocionar el inventario. Es una plataforma muy centrada en el cliente, llegado a ofrecer citas de media hora con potenciales clientes para ayudar a subir la tienda. Tan seguros están de su facilidad de uso.
Weebly: Una de las plataformas más usadas de la red, con más de 440.000 clientes. Incluye además, atención en castellano. Es posible utilizar su paquete básico de forma gratuita, lo que lo convierte en una buena plataforma para hacer pruebas antes de lanzar un negocio a la red. Funciona a base de arrastrar objetos de una lado a otro de la página y tiene una gran facilidad de uso. Naturalmente, si el negocio crece y decidimos lanzarlo, tendremos que solicitar un plan de pago.
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