Ya conocimos a Javier hace unos meses, el repartidor que nos acercó a los vehículos propulsados por gas natural. Ahora os queremos presentar a Jorge, el conductor de SEUR City, un vehículo eléctrico de cero emisiones que, para los que habiten en el centro de Madrid, es probable que os resulte familiar.

Nos hemos desplazado a uno de los puntos de venta de SEUR  para acompañar a Jorge en su ruta diaria de recogida de paquetes por las principales tiendas, oficinas y domicilios particulares de un conocido barrio de Madrid. Cuando le preguntamos por la conducción, él lo tiene muy claro: “El SEUR City es una de las formas de reparto más originales con las que cuenta la compañía”.

“El manejo es parecido al del carrito de la compra, solo que no necesitas hacer ninguna fuerza para moverlo ya que lleva incorporado un motor eléctrico en la base. Para su manejo, cuenta con un volante dirigible y un freno de emergencia que rara vez hay que activarlo ya que la velocidad máxima que alcanza es de 10 Km/hora”, nos contaba Jorge durante nuestro periplo en, por qué no decirlo, uno de los días más calurosos del verano.

Según nos relata, el SEUR City es ideal para la recogida de documentos y paquetes no muy pesados. ¿Sus principales ventajas? Que no hace ningún ruido y consigue mejorar la calidad del aire al no expulsar gases contaminantes. Tiene, además, una capacidad de 1,5 metros cúbicos y una autonomía para dos días de trabajo. “Por las noches el camión de SEUR que viene a recoger todo los pedidos del día también se lo lleva para recargar la batería en la nave central”, explicó.

Mientras avanzábamos con Jorge en la ruta nos contaba su modo de proceder cada tarde. Lo primero que hace al llegar al punto de venta es llamar a aquellos clientes a los que va a ir a recoger algún paquete para confirmar  que puede ya pasar a por ellos. Por lo general, suele hacer un total de unas 20 recogidas cada día, de entre las cuales un 80% corresponden a clientes asiduos, principalmente tiendas de ropa, despachos de abogados y otras empresas a las que todos los días acude con el SEUR City.

A medida que íbamos completando la ruta, nos dimos cuenta de que el vehículo atrae muchas miradas. “Sí, la verdad es que despierta la curiosidad de la gente. Me han ocurrido muchas anécdotas en estos últimos cinco años trabajando”, comentó. “De todas ellas, la que más gracia me hizo fue un chico que se me acercó y me pidió un helado, ¡se pensaba que el SEUR City era una carrito de helados y chucherías de los que están instalados en la calle en verano! En otra ocasión, un niño quería montarse en él y conducirlo como si fuera un juguete”, nos cuenta Jorge. “También son muchos los que se interesan por él y les llama la atención que las empresas de transporte, como SEUR, utilicen este tipo de vehículos más ecológicos”. Y a ti, ¿qué te parece?


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