Se conoce como picking al proceso de preparación de los pedidos dentro de la cadena de suministro de una empresa. Es decir, son las diferentes etapas que debe recorrer el producto antes de ser enviado.  Se trata de un proceso complejo, que puede llegar a soportar el 65% de los costes operativos.

El picking suele ser un punto crítico del proceso de preparación de pedidos. Cuanto más los optimicemos (con un flujo de recogida de productos ordenado o, por ejemplo, con tecnología que nos ayude a localizar cada producto con mayor rapidez) mejores serán los resultados de nuestra tienda.

La optimización del picking redunda en un claro beneficio para la empresa: no solo hace más ágil el proceso de preparación de los pedidos, sino que reduce los costes en gran medida. Al mismo tiempo, seremos capaces de atender los pedidos con mayor rapidez y nuestros clientes estarán satisfechos con su compra.  Sin embargo, una mala optimización o planificación puede conllevar una reducción de los márgenes de beneficio globales debido a la necesidad de aumentar la mano de obra para procesar los pedidos y, además, incrementar los plazos de entrega.

Cómo optimizar el picking: algunas ideas

Lo más importante que debes saber es que el proceso de picking se puede optimizar independientemente del tamaño de la empresa. El picking no solo debe ser implementado por grandes compañías, tan solo debemos adaptar las principales claves al tamaño y variedad de referencias de nuestro almacén, por pequeño que sea.

  • Referencias diferentes deben estar en ubicaciones diferentes. No es eficiente combinar o agrupar varias referencias en una misma ubicación, porque una vez hemos localizado el lugar donde se encuentra el producto, el operario debe buscar entre todas las referencias y ese gasto extra de tiempo es innecesario.
  • Cuanto menos tiempo de tránsito, mejor. El tiempo que se pierde entre que se localiza el producto o productos y este llega a la zona de empaquetado, debe ser el mínimo posible. Para reducir estos tiempos puedes instalar cintas transportadoras si tu empresa lo necesita o bien instalar clasificadores. Con esta organización sencilla lograrás reducir el tiempo total.
  • Evitar el picking vertical. Es importante conseguir que las tareas relacionadas durante todo el proceso se hagan a nivel de suelo, que los operarios lo tengan todo a su alcance y no tengan que estar desplazándose. Aunque esto no siempre es posible por falta de espacio, si optamos por almacenar los productos de forma vertical es importante tener optimizado este almacenamiento.  Los artículos más demandados deben situarse en los niveles inferiores y lo menos solicitado en la parte superior.
  • Mejor sin los pasos intermedios entre la recogida del pedido en el almacén y la entrega al cliente.
  • Recoge un lote y no pedidos por separado para minimizar el recorrido de los operario. Es más fácil tanto para el vendedor como para, posteriormente, la empresa de transporte logístico. Esto dependerá, como es lógico, del volumen de pedidos habitual en tu negocio.

Los almacenes más grandes requieren de soluciones más potentes (soluciones informáticas, personal, etc.), pero incluso una pequeña empresa o un pequeño eCommerce puede y debe pararse a pensar en ello, en cómo se puede optimizar el proceso que se inicia con un nuevo pedido y que termina cuando este sale a reparto.


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