El hecho de que cada vez haya más carriles bici para hacer más sostenibles las ciudades da lugar a nuevas ideas y soluciones urbanísticas, algunas cuando menos curiosas. Hay soluciones creativas a problemas que de otro modo sería complicado resolver o pequeños detalles que hacen más fácil la circulación. Y la mayoría resultan además agradables a la vista gracias a un diseño arquitectónico de primera, propio del mejor urbanismo.

En Holanda, por ejemplo, el estudio Next Architects diseñó un canal bici para uno de los distritos de Utrech, que cruza el canal Rijn de Amsterdam y se adentra en la ciudad. Pero el puente tiene 7 metros de altura sobre el suelo, de modo que el descenso (o la subida) para las bicicletas resultaría en una larga pendiente. La solución fue aprovechar un terreno colindante para hacer más suave ese recorrido, en una suave curva. Pero había un problema: el edificio de una escuela que resultaba estar justo en medio. La solución fue muy ingeniosa: llevar el carril por encima del colegio, algo pocas veces visto, para sortear el obstáculo. Problema resuelto.

La de Holanda no es la única solución que utiliza pasos elevados sobre las calles; hay otros y de gran tamaño que son bien conocidos, como la Serpiente ciclista de Copenhague o el paso elevado de Xiamen (China) de unos 8 kilómetros de longitud. ¿Una idea ingeniosa en su recorrido? Incluye unas 350 plazas de aparcamiento para bicicletas.

Utah
En Estados Unidos, donde muchas ciudades han mostrado verdaderos esfuerzos por integrar los carriles bici en las áreas tradicionalmente reservadas para los coches, hicieron hace tiempo una selección de las mejores soluciones para las bicicletas que pudieron encontrar. La mayor parte comienzan por un concepto: carriles bici protegidos que son de uso único para las bicicletas y quedan separados físicamente de la calzada de los coches y la acera de los peatones. Esto puede lograrse usando uno de los carriles ya existentes, reduciendo el ancho del resto (entre 30 y 60 cm) y ajardinando adecuadamente. ¿El resultado? La circulación mejora en general, los autobuses y furgonetas de reparto tienen su espacio y hay menos accidentes. Cambridge (Massachusetts, EEUU) y Queens (Nueva York) son dos buenos ejemplos.

Estas ideas sobre protección para los ciclistas incluyen también los cruces: esquinas redondeadas, «refugios» en los que parar y una reprogramación inteligente de los semáforos. Todo ello completa la mejor forma de enfrentarse a las intersecciones complicadas. En Salt Lake City (Utah, EEUU) probaron estas ideas con éxito. Cuando hay que compartir espacio físico demasiado cerca de los coches y autobuses la mejor idea parece ser mejorar la señalética de modo que ni coches ni peatones tengan la tentación de invadir los carriles bici.

lightlane
Otra solución realmente ingeniosa es la de Lidzbark Warmiński en Polonia. Allí se probó un carril bici con pintura luminiscente, que básicamente emite por la noche la luz que ha recibido durante el día. Es un pequeño espectáculo: lo suficientemente llamativo como para que bicicletas y peatones respeten sus carriles, pero tenue y discreto a medida que avanza la noche. Unas pequeñas luces led garantizan una iluminación mínima de forma continua.


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