fujisawa

Desde hace algunas semanas, el sueño de una ciudad inteligente «completamente inteligente» se está haciendo realidad en Fujisawa, una zona a las afueras de Tokio, en el distrito de Kanagawa. Allí un conjunto de empresas privadas y públicas trabajan juntas para hacer la prueba definitiva: qué sucede cuando se desarrolla una ciudad inteligente con todas las características que hoy en día se consideran importantes, a gran escala. La prueba incluye el desarrollo completo de un «nuevo concepto de ciudad» con nada menos que mil viviendas habitadas por familias de todo tipo.

El proyecto, denominado Fujisawa Sustainable Smart Town, parte de la idea de adaptarse al estilo de vida sostenible y las nuevas formas de entender la movilidad, la energía y la seguridad en las ciudades inteligentes. De esta forma, los servicios públicos para los ciudadanos –que además tienen una participación muy activa en todo el proceso– son la prioridad, algo que normalmente no es lo más importante en un desarrollo urbanístico.

City-Fujisawa

Entre los diversos objetivos figuran algunos muy importantes relacionados con la sostenibilidad de la zona: una reducción del 70% respecto a las emisiones de CO2, un 30% en el consumo de agua y un 30% de utilización de energías renovables.

Los ciudadanos tienen acceso a toda la información en un «portal de la ciudad» a través de tabletas y teléfonos móviles. Naturalmente, todas las casas están conectadas con fibra óptica de alta velocidad y en las calles y plazas hay wifi. La ciudad cuenta además con un edificio a modo de centro educativo y de servicios médicos. El transporte se realiza en vehículos eléctricos: coches, scooters y bicicletas tanto tradicionales como «asistidas» con baterías recargables. Quienes necesiten algo de más autonomía pueden también emplear un servicio de alquiler de coches compartidos.

El proyecto está contemplado para que evolucione a muy largo plazo: de hecho las primeras mil viviendas serán la semilla para una auténtica ciudad mucho más grande, que a lo largo de un siglo adelantará con sus experiencias cómo son las fases de construcción, crecimiento, maduración y evolución de una ciudad cien por cien inteligente. Las viviendas e infraestructuras estarán listas en diez años; la ciudad al completo para 2048. Luego cada periodo de análisis y evolución podría abarcar unos 30 años, toda una generación.


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