Stella Lux

Un grupo de más de veinte estudiantes de la Universidad Técnica de Eindhoven (Países Bajos) trabaja en un proyecto de vehículo sostenible en el terreno de los coches solares que participa en la competición World Solar Challenge que tendrá lugar el próximo mes de octubre de 2015. Su nombre es Stella Lux y el concepto de sostenibilidad que plantean puede ser toda una línea de trabajo para el futuro.

Una de sus peculiares características es que lo definen como «un coche familiar positivo en energía», dado que «es tan eficiente que genera más energía de la que consume en todo el año». No es que el Stella Lux haya roto la barrera de la «energía infinita» ni pueda llegar a ser un perpetuum mobile –las leyes de la física se siguen cumpliendo para él– sino simplemente que sus paneles solares generan más energía de la que consume en su funcionamiento, de modo que se puede «descargar» en la red, o en una vivienda, para otros usos. «Incluso en un territorio tan poco ‘solar’ como son los Países Bajos», añaden.

Stella Lux: interior

Por otro lado, la calificación de «vehículo familiar» se refiere a que a diferencia de otros prototipos su interior es espacioso y suficiente para las cuatro personas promedio de una familia. De hecho su diseño, muy «de los años 60» se ve bastante futurista con una combinación de rectas, bordes curvos y paneles LED de control. Nada de incómodos asientos al estilo «astronauta» de otros modelos.

La competición que enfrentará a diversos vehículos de este tipo recorrerá unos 2.900 kilómetros por toda Australia y en ella influirán tanto la velocidad como su peso, la forma en que generan la energía y demás. El Stella Lux todavía tendrá que enchufarse en algunas estaciones eléctricas durante los ocho días que dura el reto –tan solo podrá regenerar la mitad de la energía que necesita– pero para las versiones definitivas, o un uso más tranquilo y cotidiano, se calcula que esto no será necesario. ¿Su secreto? Un diseño especial para sus paneles solares, que se extienden por el techo y la parte trasera, y una especie de «túnel aerodinámico central» que hace más ágil el desplazamiento. El resto es cuestión de conducción y de que luzca el sol.

{Fotos: Solar Team Eindhoven (C) Eindhoven University @ Flickr}


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