Hace apenas unos años, el e-commerce era casi un desconocido incluso para los usuarios habituales de Internet. Pero su imparable desarrollo y los buenos resultados que cosecha, año tras año, han procurado una realidad: todos somos consumidores de comercio electrónico. Ya no distingue de edades ni de sexos a pesar de sus pormenores. Pero, curiosamente y a pesar de su generalización, no se puede generalizar en cuanto a hábitos de uso. Eso lo establece nuestro carnet de identidad.

Así lo demuestra el reciente estudio de ECC Handel y Hermes que permite conocer las exigencias de los consumidores de e-commerce según sus edades. Y, lo realmente curioso más allá de sus aplicaciones en el éxito de un e-commerce, son sus conclusiones: nuestras demandas no tienen nada que ver según nuestros años.

Uno de los datos más curiosos del estudio es que los consumidores de mayor edad son grandes demandantes de las descripciones de producto. Cuántos más años, más importante resulta que un e-commerce ofrezca detalles del producto, condiciones de pago y envío o los servicios adicionales que se pueden contratar al hacer nuestra compra (por ejemplo, los seguros de pérdida en el envío o los envíos express).  Algo que choca frontalmente con las demandas más jóvenes, para quiénes lo importante es que puedan tener acceso al e-commerce en la palma de la mano. O, lo que es lo mismo, una correcta optimización para smartphones. Una de las claves para cualquier e-commerce y más si se trata de una Pyme.

Y es que el smatphone marca la diferencia y más en un momento en el que su uso crece como la espuma. Para los consumidores de entre 14 y 29 años, los teléfonos inteligentes son algo ya habitual en sus vidas. Un dato que contrasta con un menor índice de penetración entre los mayores de 50 años. Lo realmente curioso es que los jóvenes no son los mejores prescriptores, aunque demandan a un e-commerce contar con opiniones de otros usuarios y poder enlazar con redes sociales. Según el mismo estudio, son precisamente quiénes no tienen acceso al mundo en la palma de la mano los perfectos difusores de información. Los datos demuestran que tienen una mayor predisposición para la red social más potente de todas: el boca a boca.

Foto | iAdvize, m1nutouno


Tags: