Son cuatro gigantes que cada vez más acaparan mercado y recursos tecnológicos, pero que también demuestran algunas carencias que están dispuestos a corregir. Una de ellas es el control sobre todo el proceso de compra que realizan sus clientes en sus e-commerce. Es cierto que han llegado a convertir sus tiendas online en referencia del comercio electrónico en el mundo. Por ejemplo, Amazon registró un volumen de negocio en 2010 de 34.200 millones de dólares y Apple obtuvo el año pasado 5.400 millones por las ventas en iTunes, Apple Store e iBook Store (según datos de las propias compañías).

Sin embargo, cuando el usuario va a efectuar un pago por sus productos, en sus web o a través del móvil, por medio siempre están los bancos y las compañías de tarjetas de crédito como parte esencial de ese proceso. De modo que su objetivo es crear sus propias plataformas de pago, sencillas y seguras, para que en un futuro puedan prescindir de intermediarios.

Google Wallet fue el primer paso de Google en esa dirección. A finales del verano pasado, salía al mercado esta aplicación para móvil, Wallet, que pretende servir de único método de pago en Google Play –como se llama ahora a Android Market–. Tal es así que ha presionado a los desarrolladores que ofrecen sus aplicaciones y otros productos en Google Play para que adopten ese sistema o abandonen la plataforma. El método es sencillo: el cliente da su número de tarjeta de crédito, que queda registrado. Cuando entra con su clave en Google Play, basta un click para efectuar la compra.

Hace un mes, para aumentar su capacidad de pagos y cobros, la compañía compraba TxVia, firma especializada en este sector, con 100 millones de cuentas. Pero Google va más allá. Es conocido su proyecto de convertir a los smartphones con sistema Android en monederos virtuales gracias a la tecnología NFC, con la que será posible comprar en cualquier tienda física solo activando una aplicación en el móvil. De modo que ya no solo quiere controlar las transacciones en Google Play sino que pretende extender su tecnología a cualquier tipo de pago online móvil.

Ni Apple ni Amazon han puesto en marcha aún proyectos con tecnología NFC, sin embargo, avanzan muy rápido en el desarrollo de los sistemas de pago en sus tiendas. La compañía de la manzana reconoce que tiene ya 200 millones de números de tarjetas de crédito almacenados en sus bases de datos. Amazon no facilita estos datos respecto a su plataforma de pago, One Click, pero su volumen de negocio es mayor que el de las tiendas Apple, así que también hablamos de cientos de millones.

El siguiente objetivo podría ser eliminar del proceso de compra a las compañías de tarjetas de crédito y desarrollar sistemas para que el importe de las ventas se cargue directamente en la cuenta del cliente. Adam Daum, analista jefe de la empresa de investigación tecnológica Canalys, lo cree así: “Es muy posible que se muevan en esa dirección. Si lo hacen, dejarían fuera de juego a las compañías de tarjetas de crédito. A los bancos les horroriza también esta posibilidad; en servicios como PayPal, el cliente mueve dinero de su cuenta a la de PayPal y no tienen ni idea de qué transacciones hacen, de cuáles son sus hábitos de consumo. Es como si trabajaran a ciegas”, comentaba recientemente al diario El País.

Facebook, con su sistema de pago Credits, está en la misma línea que los otros gigantes. El 15% de las compras en Facebook el año pasado, es decir 557 millones de dólares de ingresos, fueron a través de Credits.

Esa carrera por el desarrollo de métodos de pago online, en web y móviles, nos acerca cada vez más a un futuro donde las transacciones sean todas virtuales. ¿Será el fin del dinero en metálico?


Tags: