Search Engine Optimization o Search Engine Optimizer. Con estas denominaciones se conoce lo que en español llamamos optimización en buscadores. El tan famoso SEO o, lo que es lo mismo, el procedimiento para que tu web aparezca en las primeras posiciones cuando un usuario decide, entre las 1.000 millones de páginas existentes, según Live Stats, realizar una consulta en un buscador, habitualmente Google (el sitio más visitado del mundo, asegura Alexa).
El SEO se centra en los resultados de búsqueda orgánicos, los que no son pagados. Por tanto, no se trata de nada más, ni de nada menos, que gestionar tu web de modo que un motor sea capaz de navegar fácilmente por ella y saber de qué trata su contenido. En este sentido, te contamos cómo puedes mejorar esta optimización en 11 sencillos pasos:
1. Palabras clave: la primera palabra clave del título de un contenido online es la que tiene mayor relevancia en el rastreo que realizará el buscador. Debes conocer cuáles son esos términos y emplearlos siempre.
2. Atrapar a tu destinatario: en los títulos sobre los que acabamos de hablar tenemos una nueva oportunidad para captar la atención del buscador, empleando palabras con gancho como mejorar, oferta o guía, entre otras.
3. Una imagen vale más que mil palabras: es decir, hay que apostar por los contenidos multimedia. Se trata de que imágenes o vídeos impactantes reclamen la atención del receptor.
4. El lead periodístico vuelve a la carga: si las informaciones que lees en tu periódico del desayuno están redactadas siguiendo el viejo mandato periodístico de la pirámide invertida, en unas pocas líneas sabrás qué ha ocurrido, dónde, a quién, cómo, por qué y cuándo. Lo mismo pasa en el entorno online, las primeras 150 palabras de un artículo son las más relevantes. Por ello, debes cuidar que en ellas aparezcan tus términos clave.
5. Lo bueno, si breve, dos veces bueno: Google penaliza a las webs con tiempos de carga prolongados. Pon tu límite en 3 segundos y para todos los dispositivos.
6. URLs inmejorables: siéntate y piensa cuáles son esos poquísimos términos que te definen. Cuando los tengas detectados, llévalos a tus URLs.
7. Sumérgete en las redes sociales: no porque influyan directamente sino porque elevarán el tráfico de tu web y eso a los buscadores les encanta.
8. ¿Cuánto mides?: también importa el tamaño de tus contenidos. Unos contenidos bien desarrollados y que aporten la información necesaria serán mejor valorados.
9. Enlaces propios: protege tus enlaces y ofrece servicio de calidad. Si tus usuarios te abandonan los buscadores te penalizarán.
10. Escoge tus links externos: que sean a sitios de referencia.
11. Nos lo han enseñado desde siempre, un texto con palabras repetidas es una mala redacción: para Google también, así que apuesta por los sinónimos.
En definitiva, mejorar el SEO de tu web está en tus manos. Pon en práctica estos sencillos consejos y lo comprobarás.
Fuente: https://www.flickr.com/ ©Paloma Gómez
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