businessman-562572_640

Tener un negocio online hoy en día nos puede llevar a cometer un error importante: depender demasiado de Google y todas sus características. Si basamos todo nuestro posicionamiento y el negocio en los resultados del buscador, y en el tráfico que éste nos deriva a través de las diferentes búsquedas para las que estamos bien expuestos, cualquier cambio de importancia en el algoritmo puede tener consecuencias imprevisibles (y graves) en los ingresos y, en última instancia, en la viabilidad del negocio.

Por ello, es interesante fijarse en otras maneras de conseguir tráfico y resultados, y una de ellas puede ser el marketing de afiliados, una forma de externalizar las ventas de nuestros productos y de mantener un canal de ventas independiente de Google.

Tu propia red de ventas que dirige tráfico a tu web

El marketing de afiliados no es difícil de entender, ya que se trata de algo tan simple como disponer de tus productos de manera que otros, tu red de comerciales, puedan venderlos por ti. A la hora de formalizar la compra, esta se realiza en tu propia página, a la que ha dirigido ese comercial al comprador final. Tú haces la venta efectiva y el que hizo de comercial se queda con una comisión.

Este tipo de marketing tiene muchas ventajas para el afiliado, como lo son elegir el producto a vender, no necesitar stock ni almacén, la posibilidad de ganar buenas comisiones con una inversión mínima… Y para el vendedor también tiene muchas ventajas frente a otras herramientas de promoción como los anuncios display con campañas basadas en CPM (se paga un importe fijo por un número de impresiones de anuncio fijas).

Mediante el marketing de afiliados solo estamos pagando por cada venta cerrada, con lo cual es muy sencillo dimensionar las comisiones y márgenes de manera que no invirtamos dinero (que no nos cueste nada ese marketing). Básicamente no hay manera de perder dinero o tener ROI negativo con este método de comercialización. Por cada nueva venta generada hemos de restar el margen (la comisión) que va para el afiliado, pero es posible estructurarlo todo de tal manera que se elimina la posibilidad de una pérdida.

El marketing de afiliados no es la panacea, hemos de tener esto en cuenta. Sí es una forma de hacer negocio sacrificando parte de nuestro margen, y con ello podemos aumentar las ventas, pero si basamos todo nuestro ecommerce en afiliados estaremos pagando un coste elevado en comisiones frente a otras formas de venta más ventajosas en el beneficio total que nos dejan. Otra opción es ofrecer a los afiliados comisiones por eventos más que por ventas de producto: suscripción a newsletter, cupones

Es una buena estrategia para complementar fuentes de ingreso. No dependeremos tanto de Google y sus cambios en el algoritmo si desarrollamos una red de ventas eficiente en torno a este marketing de afiliados, y siempre que sepamos mantener el balance perfecto entre unos y otros estaremos maximizando las posibilidades de nuestro negocio.