Strava / Mapa de calor

Una compañía llamada Strava ha realizado todo un ejercicio de «demostración de fuerza» publicando en un mapa de calor global 220.000 millones de datos de «puntos GPS» recogidos por su aplicación en diversos dispositivos que lleva la gente encima mientras hace deporte en bicicleta, corriendo o simplemente caminando.

En total se trataba de colocar unos 77 millones de paseos en bicicleta y 20 millones de recorridos a pie sobre un mapa, un gran reto de ingeniería en sí mismo. El resultado es un mastodóntico producto que, además de una versión gratuita, se comercializa también para usos profesionales en el campo del GIS (Sistemas de Información Geográfica).

Strava / Detalle

Y es que los datos de gran volumen de este tipo pueden servir para un montón de aplicaciones en las ciudades inteligentes, por ejemplo: ¿Por dónde circula la gente? ¿Qué aceras y calzadas debemos reparar? ¿Dónde se concentran los aficionados a las bicicletas? Un simple vistazo a los mapas ya proporciona algunas pistas, pero en los detalles y las grandes hojas de cálculo que se pueden manejar hay mucha más información interesante.

Los trabajos que se han realizado con estos datos incluyen el análisis en especial de las formas de transporte alternativas los días laborales normales y corrientes: si se utiliza la bicicleta y combinada con qué tipos de transporte, dónde se dejan aparcadas o qué rutas son las más populares. Esta gigantesca base de datos es probablemente una fuente de datos que puede resultar muy relevante para quien esté trabajando en medios de transporte alternativos.

Strava / Cómo funciona

¿De qué forma se recogen los datos? Hay varias, desde smartphones iPhone y Android a algunos modelos de relojes Garmin, Soleus y Timex. La forma de hacerlo es a través de los receptores GPS, de modo que los datos tienen bastante precisión respecto a otros métodos. La forma de motivar a la gente a utilizar el software es ofrecer de forma gratuita la app con algunas funciones útiles, un archivo histórico y la consulta de algunos datos; las opciones más avanzadas (clasificaciones, etcétera) requieren una versión de pago.

El conjunto de información es tan vasto que representa en buena medida a los ciclistas o corredores típicos de cada ciudad, aunque como ya avisan sus creadores, hay que tener en cuenta que los más «profesionales» pueden no estar incluidos.


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