Este automóvil de Product Tank es un diseño conceptual: lo importante son los detalles y algunas de las ideas subyacentes, más que el coche al completo que no es más que una especie de maqueta. En Yanko Design, una web especializada en este tipo de diseños futuristas, lo han reseñado resaltando algunos de sus detalles, que merece la pena examinar.
Para empezar, el coche es eléctrico y tiene un diseño anti-aerodinámico, pensado más en maximizar el espacio interior que el surcar las calles con velocidad – total, por ciudad tampoco es que se pueda ir muy rápido. Su creador dice que lo creó pensando en la comodidad de su abuela, pero de algunos de los detalles que surgieron de su cabeza se puede aprender mucho.
Por ejemplo casi todos los elementos están minimizados, prácticamente a escala: desde las ruedas al volante, los paneles, palancas… todo en pro de ganar espacio interior para los pasajeros y la carga. Sin embargo, los componentes con los que se lleva a cabo esta idea son más o menos estándar y baratos, nada de alta tecnología: la idea era también crear un coche asequible.
El maletero es un nido de sorpresas: no solo permite llevar objetos sin que se «muevan» demasiado en las curvas –gracias a un diseño ondulado- sino que, además, incorpora una pequeña «grúa» para subir cómodamente bolsas pesadas. Cuenta con unas bandejas adicionales que sirven para cargar y descargar todo tipo de objetos. Para facilitar el acceso en el pequeño receptáculo del conductor y el copiloto los asientos son giratorios e incluso se pueden desmontar completos.
Las noches o los aparcamientos oscuros tampoco son problema para sus ocupantes porque va equipado con luces en las puertas y el suelo que iluminan incluso parte del exterior. Al igual que en otros coches modernos, los retrovisores se mueven para cubrir todos los ángulos y no dejar puntos muertos. El limpiaparabrisas, incluso, está optimizado: con un diseño diferente cubre mucha más superficie que unas escobillas normales, dando así un poco más de limpieza y seguridad al conductor.
Su creador dice que la idea y el vídeo explicativo han sido muy bien recibidos por la comunidad y que con algunas de las ideas de los internautas han realizado incluso una segunda versión ligeramente mejorada – por ejemplo con un diseño más suave para que el «pequeño tanque» resulte menos peligroso para los peatones en caso de atropello. Quién sabe si algún día será un coche que podamos ver por las calles.
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